Disco duro M.2
Desde hace algunos años, los discos de estado sólido o SSD han ido abaratando su precio hasta convertirse en el estándar de almacenamiento de la mayoría de ordenadores. Actualmente, los discos duros SSD y SSD M.2 se han impuesto a los HDD.
Por su parte, el formato SSD M.2 también está ganando popularidad, no solo por su tamaño, sino que también por las grandes ventajas que aporta frente a los discos SATA.
¿Quieres saber qué es un SSD M.2 y cuáles son sus principales diferencias y ventajas frente a los SSD SATA? En este artículo te lo explicamos y te aconsejamos algunos de los mejores discos duros del mercado.
¿Qué es un disco SSD M.2?
El SSD M.2 es un formato de almacenamiento que cuenta con memorias 3D NAND, hace uso de la interfaz PCI-Express con 4 raíles (x4) y tiene un tamaño mucho más pequeño que una unidad SSD de 2.5 pulgadas. Asimismo, los beneficios directos se traducen en ahorro de espacio, conexión más sencilla, velocidades de transferencia muy superiores y una latencia más reducida.
Si quitamos la tapa o carcasa superior del SSD M.2, encontraremos lo siguiente:
- Una PCB.
- Módulos de memoria 3D NAND.
- Una memoria RAM.
- Un controlador de memoria.
- Thermal pads para refrigerar los módulos de memoria.
- Disipador, que puede ir desde una calidad básica hasta una solución pasiva realmente buena.
Muchos pensarán que la clave está en tener unas memorias 3D NAND MLC de alta calidad, teniendo parcialmente razón. Existen una batalla feroz entre los diseñadores de controladores de memoria, que son claves para conseguir velocidades de transferencia altas. Asimismo, su memoria RAM, que no es muy grande, tiene un papel importante.
Este formato de disco duro SSD M.2 nace como una solución al límite de los 6 Gb/s existente en los puertos SATA, ya que la interfaz PCI-Express tiene un ancho de banda tremendamente superior. Inicialmente, se empezó experimentando con unidades SSD PCIe, es decir, unas tarjetas de expansión que se conectaban directamente a una ranura PCI-Express x16 o x8. Todo el mundo alucinaba con las velocidades que se conseguían, unos datos que hoy son completamente anecdóticos. Parece que fue ayer y ya ha pasado una década.
A estas alturas, la mayoría de SSD M.2 vienen con protocolo NVMe, ayudando tremendamente a conseguir mayores velocidades de transferencia; de hecho, veréis distintas versiones (la más reciente es la mejor) especificadas en ficha técnica.
Por último, es importante destacar que la versión de PCI-Express es el factor que marca el máximo de velocidad de transferencia que se puede alcanzar por cada unidad. Teniendo en cuenta que la mayoría de unidades SSD M.2 hacen uso de 4 raíles en PCIe (x4), el límite en PCIe 3.0 es de 3.94 GB/s, en PCIe 4.0 es de 7.88 GB/s y en PCIe 5.0 es de 15.76 GB/s.
información: https://www.pccomponentes.com/elegir-mejor-disco-duro-externo?revalidate
Comentarios
Publicar un comentario